En una de esas tardes que quedarán marcadas en la historia del fútbol paraguayo, Olimpia logró una victoria contundente de 3-0 frente a su eterno rival, mostrando una vez más porqué es el Decano y Rey de Copas del fútbol paraguayo. Desde los primeros minutos, Olimpia fue ampliamente superior, dejando en claro la diferencia histórica entre ambos equipos.

El primer gol llegó apenas a los 3 minutos de juego, cuando Erik López, en una jugada que pareciera que el tiempo se pausara por un segundo, remató de primera y puso el 1-0, tirándole todo el peso de la historia al rival. Rápidamente a los 6 minutos, en una jugada que parecía un “Dèjá vu”, Richard Ortiz y nuevamente de media chilena, como igual que hace dos años, en la última victoria de Olimpia frente a Cerro y a domicilio, se encargó de aumentar la ventaja a 2-0, mostrando la fuerza del Franjeado en un partido que fue parejo hasta que empezó. En tan solo los primeros 10 minutos del primer tiempo, Olimpia liquidó el partido. 

Finalmente, cuando los primeros 45 minutos se iban, Manuel Capasso, ya acostumbrado a marcar de cabeza, cerró el marcador con el 3-0, un resultado que se sintió como una humillación para el equipo de Barrio Obrero, que no encontraba la forma de parar al Expreso Decano. En el segundo tiempo, Olimpia tuvo oportunidades para ampliar la ventaja, pero decidió perdonar el arco azulgrana.

Con esta victoria, Olimpia sigue puntero del campeonato Clausura, dejando a Cerro Porteño afuera de cualquier chance al título, con tan solo cinco fechas restantes. Ahora, el Decano se enfoca en su próximo desafío por los cuartos de final de la Copa Paraguay, el miércoles 30 de octubre en el estadio, Defensores Del Chaco.